Esta obra describe la implementación de la perspectiva Montessori demostrando que la utopía es posible aun en un ámbito de pobreza, y que se puede trabajar en equipo con los recursos más limitados.

El lector encontrará en este libro no solo las claves de la transformación, sino también criterios que permiten pensar en que una metamorfosis educativa es posible, aun en entornos desfavorecidos (¡o quizás, a partir de ellos!). En la pedagogía montessoriana al niño se le ofrecen distintas actividades para que elija libremente la que quiere realizar; pero esta metodología se basa en normas para el uso de los materiales, con propósitos muy claros para cada uno de ellos que desarrollan en el niño el autodominio, el control de sus movimientos, la paciencia de saber esperar, la solidaridad y el respeto a la diversidad.

El Centro Infantil "Manitos abiertas" es fiel testimonio de que la perspectiva Montessori no solo es para todxs, sino que responde especialmente a las necesidades de las infancias  humildes porque, para quien no puede elegir muchos aspectos de su vida, la libre elección significa devolverle su dignidad.

Sobre María Montessori:

Nace el 31 de agosto de 1870 en Chiaravalle, Italia. Cursa estudios de ingeniería a los catorce años, después estudia biología y es aceptada en la Facultad de Medicina de la Universidad de Roma, donde se gradúa en 1896 como la primera mujer médica en Italia. En 1901 es designada directora de una clínica psiquiátrica asociada a la Universidad de Roma dedicada al cuidado de niños con retrasos mentales. Allí comienza a estudiar los trabajos de dos médicos franceses, Jean Itard y Édouard Séguin. Elabora la pedagogía científica, un enfoque que parte de la observación y la experimentación. Al ver los resultados alcanzados por esos niños comienza a reflexionar sobre la educación general, así es como estudia antropología y obtiene un doctorado en Filosofía, época en la que asiste a uno de los primeros cursos de psicología experimental. En 1907, Montessori establece la primera Casa de los Niños en San Lorenzo, un barrio muy pobre de Roma. El cambio producido en esos niños comienza a llamar la atención de la opinión pública y el mundo entero. Las ideas de la doctora serían reconocidas en adelante como el Método Montessori. Fallece en 1952.

La pedagogía Montessori: una posibilidad para todas las escuelas

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Esta obra describe la implementación de la perspectiva Montessori demostrando que la utopía es posible aun en un ámbito de pobreza, y que se puede trabajar en equipo con los recursos más limitados.

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El Centro Infantil "Manitos abiertas" es fiel testimonio de que la perspectiva Montessori no solo es para todxs, sino que responde especialmente a las necesidades de las infancias  humildes porque, para quien no puede elegir muchos aspectos de su vida, la libre elección significa devolverle su dignidad.

Sobre María Montessori:

Nace el 31 de agosto de 1870 en Chiaravalle, Italia. Cursa estudios de ingeniería a los catorce años, después estudia biología y es aceptada en la Facultad de Medicina de la Universidad de Roma, donde se gradúa en 1896 como la primera mujer médica en Italia. En 1901 es designada directora de una clínica psiquiátrica asociada a la Universidad de Roma dedicada al cuidado de niños con retrasos mentales. Allí comienza a estudiar los trabajos de dos médicos franceses, Jean Itard y Édouard Séguin. Elabora la pedagogía científica, un enfoque que parte de la observación y la experimentación. Al ver los resultados alcanzados por esos niños comienza a reflexionar sobre la educación general, así es como estudia antropología y obtiene un doctorado en Filosofía, época en la que asiste a uno de los primeros cursos de psicología experimental. En 1907, Montessori establece la primera Casa de los Niños en San Lorenzo, un barrio muy pobre de Roma. El cambio producido en esos niños comienza a llamar la atención de la opinión pública y el mundo entero. Las ideas de la doctora serían reconocidas en adelante como el Método Montessori. Fallece en 1952.