Golpes. Malvinas, democracia, dictadura

Alejandro Kaufman

Este libro es un planteo en tres tiempos, tres gramáticas, tres sonoridades: un crítico cultural contemporáneo, un manifiesto libertario que circuló en Buenos Aires durante la guerra de Malvinas y una entrevista a Massera en 1980.  La constelación es inquietante y sugiere la presencia de un vórtice que no puede ser explicado de una vez y para siempre, sino más bien recorrido en algunas de sus superficies. Una problemática antes que un concepto o un hecho: los golpes, las experiencias que violentan las sensibilidades colectivas, son reacios a las totalizaciones del discurso. La constelación es inquietante además porque abre grietas en los muros en torno de lo que quisiéramos haber resuelto a través del juicio y del castigo a los perpetradores, para sugerir que somos responsables, aquí y ahora, de todas las víctimas más allá de cualquier cálculo. Una responsabilidad que no se agota en la ley y sus procesos, sino que se expande de una manera intensa, deontológica, práctica: somos infinitamente responsables ante todas las víctimas para aspirar a seguir siendo lo que éramos

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Este libro es un planteo en tres tiempos, tres gramáticas, tres sonoridades: un crítico cultural contemporáneo, un manifiesto libertario que circuló en Buenos Aires durante la guerra de Malvinas y una entrevista a Massera en 1980.  La constelación es inquietante y sugiere la presencia de un vórtice que no puede ser explicado de una vez y para siempre, sino más bien recorrido en algunas de sus superficies. Una problemática antes que un concepto o un hecho: los golpes, las experiencias que violentan las sensibilidades colectivas, son reacios a las totalizaciones del discurso. La constelación es inquietante además porque abre grietas en los muros en torno de lo que quisiéramos haber resuelto a través del juicio y del castigo a los perpetradores, para sugerir que somos responsables, aquí y ahora, de todas las víctimas más allá de cualquier cálculo. Una responsabilidad que no se agota en la ley y sus procesos, sino que se expande de una manera intensa, deontológica, práctica: somos infinitamente responsables ante todas las víctimas para aspirar a seguir siendo lo que éramos