"Siguiendo un impulso, una mujer se anota en un curso de Lengua de Señas. Llega al aula y se sienta sola frente al profesor. Una persona oyente frente a una persona sorda. Qué va a pasar ahora? Y ahora? Todo es silencio. Todo es comienzo.
Parece una buena premisa para narrar, y en efecto lo es. Pero pasa de buena a perfecta si quien va a registrar el proceso de aprendizaje es Tania Dick. Tania escribe hace muchos años; sin embargo, este es su primer libro publicado. Todos sus textos tienen que ver, de las maneras más sutiles, con el cuerpo y con el espacio: con el movimiento. En este caso el movimiento es el idioma; el cuerpo va a tener que aprender sus recorridos para poder comunicar, la mente va a tener que aprender los recorridos de otro cuerpo para poder entender. Las manos en el escritorio y mis ojos desbordados de recorridos, dice Tania. Y después: No decir la palabra que pienso, moverla para que gire y gire. Tania tiene un sentido extra: puede percibir modificaciones ínfimas. Del aire, del sonido, del cuerpo, del ánimo. Y lo que es más asombroso: puede decirlas. Encuentra las palabras para decir lo que es casi una abstracción, y encuentra la sintaxis. A veces parece que tanteara: voy a poner esta palabra acá, o mejor no, o mejor sí: Estoy en la zona del error, como una traductora buscando lenguaje.
Quién si no ella, entonces, podría relatar la morfología, la sensorialidad y la emoción de un curso de Lengua de Señas?"

Laura Wittner

DIARIO DE UNA APRENDIZ DE SEÑAS

$20.900
Envío gratis superando los $90.000
No acumulable con otras promociones
¡No te lo pierdas, es el último!
DIARIO DE UNA APRENDIZ DE SEÑAS $20.900
Entregas para el CP:

Medios de envío

  • Ritualitos Pieres 103, esquina Ramón Falcón, Liniers, CABA. Horario de atención de martes a viernes de 11 a 19 hs. Sábados de 11 a 17 hs.

    Gratis
Cambios y devoluciones
Si no te gusta, podés cambiarlo por otro o devolverlo.

"Siguiendo un impulso, una mujer se anota en un curso de Lengua de Señas. Llega al aula y se sienta sola frente al profesor. Una persona oyente frente a una persona sorda. Qué va a pasar ahora? Y ahora? Todo es silencio. Todo es comienzo.
Parece una buena premisa para narrar, y en efecto lo es. Pero pasa de buena a perfecta si quien va a registrar el proceso de aprendizaje es Tania Dick. Tania escribe hace muchos años; sin embargo, este es su primer libro publicado. Todos sus textos tienen que ver, de las maneras más sutiles, con el cuerpo y con el espacio: con el movimiento. En este caso el movimiento es el idioma; el cuerpo va a tener que aprender sus recorridos para poder comunicar, la mente va a tener que aprender los recorridos de otro cuerpo para poder entender. Las manos en el escritorio y mis ojos desbordados de recorridos, dice Tania. Y después: No decir la palabra que pienso, moverla para que gire y gire. Tania tiene un sentido extra: puede percibir modificaciones ínfimas. Del aire, del sonido, del cuerpo, del ánimo. Y lo que es más asombroso: puede decirlas. Encuentra las palabras para decir lo que es casi una abstracción, y encuentra la sintaxis. A veces parece que tanteara: voy a poner esta palabra acá, o mejor no, o mejor sí: Estoy en la zona del error, como una traductora buscando lenguaje.
Quién si no ella, entonces, podría relatar la morfología, la sensorialidad y la emoción de un curso de Lengua de Señas?"

Laura Wittner